Contribuye a la aceptación del espectador si al escribir el guion y durante el casting se plantea cómo debe ser el acento de un personaje y su intérprete. En síntesis, todo personaje es de algún sitio y tiene un pasado, por lo que evidenciará unos fonemas y entonación determinados en un momento concreto, tal vez independientemente de su cuerpo. En él influyen las personas y medios de alrededor, así que puede cambiar con el tiempo.
Todos tenemos acento
Los acentos suelen relacionarse con una región del mundo específica, una determinada variedad territorial. Incluso las modulaciones neutras como el español internacional (latino) o en inglés transatlántico (usado en las películas de Hollywood hasta los años 40) son una variante concreta que alguien puede buscar reproducir, aunque se hayan configurado artificialmente.
En ocasiones será necesario documentarse y alguna vez habrá que elegir a pesar de que no se sepa con certeza. Por ejemplo, quizá no es posible conocer cómo enunciaba tal personaje histórico del siglo XVII. No obstante, tendría sentido extrapolar con un caso de la contemporaneidad y aplicarlo. Si ese hondureño vivió en la Valencia de España durante 30 años, probablemente se habría reflejado de tal o cual manera en su pronunciación; dicción que un dialect coach sería capaz de explicar a un actor con lo que se sabe gracias a muestras reales recientes.
Cuando el acento del intérprete no encaja
Con respecto a la relación entre el acento de un personaje y su intérprete, ya he abordado las posibles causas y consecuencias de que no haya una correspondencia exacta. Existen bastantes artículos con ejemplos o surgirán en la mente de muchos.
Sí me gustaría comentar que a veces el acento fuera de lugar (misplaced accent) se da adrede, a menudo temporalmente, por humor u otros fines como infiltrarse. En las tramas de espías, el verdadero acento puede emerger de forma puntual inconscientemente por un descuido del personaje (accent slip-up) o dejar de ocultarse cuando ya se ha revelado el secreto (accent relapse).
Por otra parte, durante la preparación de la obra original siempre está la opción de que un nativo haga doblaje a un intérprete. Así, para La double vie de Véronique (1991) la actriz francesa Irène Jacob pronunció durante el rodaje sus líneas aprendidas en polaco, pero su voz la doblaría en postproducción la actriz polaca Anna Gornostaj para sonar realista.
En ese caso había doblaje con ajuste labial, sin embargo, podría no haberlo. En algún western como Il buono, il brutto, il cattivo (1966), en el que participaban estadounidenses, italianos o hispanohablantes, rodaron cada uno en su idioma aunque la versión original de la película terminaría siendo en uno.
Por último, cabe mencionar el caso del mandarín estándar. Uno de los varios motivos por el que muchas veces se dobla a los intérpretes a su propio idioma es porque su acento no encaja en la época o el lugar. Téngase en cuenta que no siempre se elige al mismo doblador para un actor o se usa el mismo para varios actores conocidos, algo que puede no agradar a la audiencia. La voz suele ser un elemento importante de la actuación.
El acento de los personajes viene del entorno
Modulamos como oímos a nuestro alrededor, pero no ha sido tan frecuente hasta hace poco en la ficción audiovisual, sobre todo en series, que la acción se situase lejos de las capitales y que los intérpretes hablasen como si procedieran del lugar en el que se ambienta la historia. Por ejemplo, en España es más excepción que norma que haya series con acentos no neutros, como el malagueño (andaluz) de Malaka (2019).
En principio, una argelina asentada en Montevideo hablaría en casa a su hijo en árabe en su variante de Argelia y fuera del hogar él aprenderá español de Uruguay. Si recibe suficiente input de ambos idiomas y los practica, se defenderá en los dos como un nativo.
Gente criada en el mismo contexto, como tres hermanos que no se lleven muchos años, debería tener el mismo acento. Cuando esto no se cumple, algunos espectadores agradecerían una explicación breve. En vez de ser un trámite, la divergencia podría deberse a algo relevante en la vida o personalidad del personaje o importante para el desarrollo del relato. En la telenovela Revenge (3×22, 2011-2015), Gideon no tiene acento francés hablando inglés, porque, a diferencia de su media hermana por parte de padre, él fue educado en centros estadounidenses por decisión exclusiva de su madre.
Consideremos también que hay acentos personales, esto es, una manera especial de articular. Al aprender un idioma, si no nos proponemos adquirir un acento concreto y los emisores que nos rodean y los materiales no provienen de la misma área geográfica o en suficiente cantidad, el resultado es una colección algo aleatoria de palabras y una mezcla de entonaciones de diversos dialectos con el idioma nativo como base.
De este modo, el personaje británico Archie Hicox en Inglorious Basterds (2009) buscará hacerse pasaúr por alemán cuyo acento peculiar no logran situar dos de los antagonistas germanoparlantes y por ello surge desconfianza. En esa secuencia se mostrará cómo cada cultura tiene también sus gestos distintivos además del idioma.
Por su parte, los androides de varios relatos son capaces de expresarse con cualquier acento e incluso voz. De manera similar, el acento de un personaje cambia justificadamente si está activado un accent filter como el de Millie en el videojuego de la película Free Guy (2021).
La evolución del acento de un personaje
La entonación y pronunciación de un personaje puede evolucionar o incluso fluctuar, bien porque así se lo propone como en estos relatos o bien porque las circunstancias lingüísticas influyen.
Cuando depende de dos grupos de producción diferentes, la cuestión se complica. De ahí que un personaje puede tener acento de Texas de adulto, pero curiosamente no en el spin-off posterior que narra su infancia en la región.
Hablar una lengua adquirida es más que un acento
Más o menos estereotípicos, es habitual que un personaje expresándose en un idioma del que no es nativo siga utilizando rasgos fonéticos de su primera lengua. Sin embargo, querría apuntar una cosa más allá del acento cuando los personajes hablan un idioma extranjero y que no veo que se muestre en tantos guiones.
Al tratar de comunicarnos en una segunda lengua cometemos errores durante los primeros años o décadas, fallos muy vinculados a la lengua materna que subyace y puede que hasta al sistema educativo de cada país.
Así, a un chino que tenga cierta fluidez en castellano seguirán costándole durante años ciertos aspectos gramaticales, vocabulario o refranes. Además, su discurso será diferente al que tendría alguien de Namibia o Finlandia con los mismos años de estudio del idioma e inmersión.
Es poco probable que lo único que alguien siga utilizando de su idioma nativo sean precisamente las expresiones más sencillas que antes se aprenden al estudiar una lengua extranjera, como buenos días.
Por otro lado, conviene tener en cuenta que repetir determinadas elecciones en las historias puede llevar a caricaturas y a prejuicios, como que los héroes infantiles hablen casi siempre con nuestro acento y los villanos suenen a extranjeros (lo diferente).
¿Cuándo se pierde el acento?
No deberíamos ignorar tampoco que aprender un nuevo idioma a una edad temprana es más rápido, así como más factible llegar a un nivel nativo.
La película Salt (2010) y la serie The Americans (2013-2018) muestran la misma premisa lingüística. Son personas que hablan ruso de primera lengua y buscan aprender inglés como nativos para que los demás crean que son estadounidenses. La diferencia es que mientras la protagonista de la primera empieza su aprendizaje antes de los 6 años, los personajes de la otra estarán terminando su adolescencia cuando inicien sus clases, lo cual hace menos creíble para algunos que hubiesen perdido completamente su acento eslavo.
El cerebro es sorprendente en caso de necesidad y me parece que la existencia de un período crítico para el aprendizaje lingüístico no está demostrada del todo, así que no me atrevería a ser categórica a este respecto.
Una variedad dialectal como indicativo de ser extranjero
En obras audiovisuales de habla inglesa no es raro que en vez de usar lenguas extranjeras se hable en diferentes acentos del mismo idioma para expresar que vienen de otro país en el que se habla otra lengua. Por ejemplo, los protagonistas se expresan en inglés con acento de EE. UU. y los personajes extranjeros en inglés con acento australiano o irlandés, no porque sean de allí sino de otros lugares donde el inglés no es lengua oficial, como el planeta Krypton.
El acento como huella de cambio de idioma
Ya he comentado que es posible utilizar un recurso audiovisual que refleje que los personajes siguen hablando en su idioma esperado aunque los actores hayan empezado a hablar en otro idioma para que la audiencia lo comprenda. En tales casos, los intérpretes pueden expresarse en una lengua pero con acento de la otra.
En Eurovision Song Contest: The Story of Fire Saga (2020) la acción comienza en un pueblo islandés, donde un grupo de vecinos están viendo a Abba cantando en Eurovisión. Los intérpretes pasan de hablar islandés a inglés con acento ¿islandés? cuando el niño que bailaba se gira bruscamente, acompañado de cierto efecto. A partir de entonces ese inglés nórdico representará al idioma islandés cuando los personajes islandeses se comuniquen entre sí.
Por todo esto parece beneficioso que el creador y productor de historias audiovisuales piensen bien cómo se expresan sus personajes. Su forma de hablar es un apartado clave en la caracterización y en la fuerza de la historia.