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Narrativa

Lenguas y otros códigos que descifrar en cine/tv

Como ya he comentado varias veces, el lingüístico es uno de los muchos códigos que componen un relato audiovisual. En ocasiones, en la historia toma especial importancia descifrar una lengua natural como los jeroglifos en Stargate (1994) o un código equivalente al lingüístico humano, sea animal o artificial, tal que en Free Willy 3: The Rescue (1997) o los mensajes secretos cifrados durante la guerra de Enigma (2001).

Candado abierto que cuelga de una cerradura

En algún caso el reto consiste en identificar la palabra de un crucigrama, solucionar un acertijo, descubrir un anagrama o similar. A menudo los códigos son una prueba / obstáculo en una obra de aventuras, como el latín o el pentagrama de The Goonies (1985) o antes de encontrar y abrir el arca de Indiana Jones (1981). Los códigos son también un desafío común para el genio informático, para alguien en el espectro autista o para un policía. Así, el protagonista de Endeavour (2012-) logra identificar distintos mensajes en sus investigaciones (prestó su servicio militar como criptógrafo para la Royal Corps of Signals). Este detective se apellida precisamente Morse.

Si hay un código por excelencia que parece saber todo el mundo en la ficción es el morse, ¡sin consultar una tabla ni nada! En los filmes y series este no se usa solo en el telégrafo, sino con la luz en medio de la noche, pestañeos, silbidos o movimientos de la mano que generalmente pasan inadvertidos. Me abstengo de describir ejemplos para no hacer spoilers y me limito a recomendar en este sentido Interstellar (2014), con dos casos de descodificación, uno de ellos bastante singular.

En The Office (2005-2013) Jim y Pam usaron un día el código morse para meterse con Dwight

Incluso fuera de la obra en sí, el propio título de alguna serie o película tiene un porqué que no suele ser evidente y que se desvelará en el contenido.

Parece, pues, que la ficción puede ser creativa en cuanto a descifrar códigos. Si se busca inspiración, en el mundo real quedan misterios por desvelar y para los que las hipótesis podrían ser interesantes: el manuscrito Voynich, el origen del lenguaje (¿un virus?) o el idioma al que se refiere el Lineal A de la antigua civilización cretense.