Las decisiones concretas que atañen a los idiomas y que se han tomado durante la producción de una obra audiovisual conforman su diseño lingüístico. Cada paso en una u otra dirección implica unos u otros efectos en el relato, la audiencia o incluso la sociedad. Por tanto, parece útil plantearse conscientemente en preproducción qué pretendemos con cada elección lingüística teniendo además en cuenta factores económicos, sociales y culturales.
Puede ser que el tratamiento lingüístico de muchas piezas no requiera más de unos minutos de atención. En otras series o películas el trabajo detrás es meritorio, aunque no siempre perceptible o reconocido. Y en alguna ocasión la forma en que se presentan las lenguas deviene uno de los pilares del guion.
Las posibilidades comunicativas del lenguaje audiovisual
Tomemos el largometraje The 13th Warrior (1999) como ejemplo de algunas disyuntivas lingüísticas y de cómo el medio audiovisual tiene potencial no solo para mostrar la realidad, sino para comunicar de una manera propia.
Este filme estadounidense lo protagoniza un actor muy popular cuyo idioma nativo es el español y su personaje habla árabe mostrado verbalmente como inglés. Combinaciones similares no son infrecuentes y tienen su explicación.
Al principio de la historia, el protagonista aprende la lengua nórdica de un grupo con el que ha empezado a convivir y que también se terminará mostrando como inglés. Muchos hemos cuestionado la verosimilitud de esta (finalmente breve) secuencia sobre la inmersión lingüística total, pues tal vez no queda muy claro el paso del tiempo, pero tanto este como otros aspectos de la película son notables.
Basada en una novela, El guerrero nº 13 refleja que las lenguas clásicas se usaron en su día como lengua vehicular; inserta un intérprete para los primeros momentos de comunicación; recrea una hipotética lengua escandinava del siglo X con la coordinación de una sociolingüista especializada y juega con los planos, el montaje o los acentos para transmitirnos sin subtítulos que alguien va adquiriendo un idioma, confeccionando así un recurso audiovisual para ello.
Con la diversa filmoteca global que existe hoy, conocer el camino del diseño lingüístico de ciertas obras y sus capas resultantes me parece fascinante y por eso compartiré mis impresiones.